rancisco
García Calderón Landa, ilustre jurista, político y diplomático, nació en
Arequipa el 2 de abril de 1834. Fue hijo de Eduardo García Calderón y Crespo y
de María Ventura Landa. Este eminente ciudadano, estudió en el Colegio Nacional
de la
Independencia Americana de su ciudad natal, donde fue
profesor e hizo sus estudios
profesionales en la
Universidad de San Agustín de Arequipa, graduándose de
abogado y doctor en jurisprudencia a los 19 años, pero no pudo ejercer la
profesión por leyes de la época hasta que cumplió 21 años .Estos años los
aprovechó para redactar su “Diccionario de la Legislación Peruana”,
que más adelante completó y que fue premiado con una medalla por el Congreso de
la República,
esta obra aún es de consulta útil para las abogados hasta el día de hoy.
Entre
los cargos más importantes desempeñados por este ilustre patricio se puede
mencionar:
Profesor
en la Universidad
de San Agustín de Arequipa en los cursos de Derecho Civil, Natural, Canónico e
Internacional.
Oficial
Primero de la
Dirección General de Hacienda en 1864 y luego laboró en la Dirección de
Administración del Ministerio de Hacienda.
Diputado
por Arequipa en 1867 en el Congreso Constituyente, en el cual ejerció la Presidencia.
Ministro
de Hacienda, en 1868 desde el 4 de abril al 15 de diciembre.
Decano
del Colegio de Abogados de Lima de 1874 a 1876.
Presidente
del Círculo Literario en 1875.
Senador
por Arequipa de 1876 a
1879.
Por
muchos años fue Gerente General del Banco de la Providencia y desde
esa posición, tuvo una participación influyente en la economía nacional.
Tras
la ocupación Chilena de Lima, el Presidente Nicolás de Piérola se retiró a
Ayacucho para seguir la guerra. Paralelamente en Lima, los “vecinos notables”
se reunieron el 12 de marzo de 1881 y eligieron por 104 votos de 114 votos
escrutados a Francisco García Calderón Landa Presidente Provisional de la República,
estableció su gobierno del Perú en el Pueblo de La Magdalena Vieja
(hoy Pueblo Libre).
El pueblo de la Magdalena pasó a ser
territorio neutral donde la bandera peruana pudo flamear nuevamente y se le
permitió al nuevo gobierno tener una pequeña guardia urbana, formada por
vecinos interesados en la conservación del orden público. Jorge Basadre reseña
que García Calderón emitió un Decreto que no
fue aceptado a cabalidad por el ejército de ocupación, de acuerdo a este
decreto la guardia urbana se componía de cinco legiones, cada una de ellas
dividida en cuatro compañías y dotada de dos jefes y su respectiva oficialidad
y tendrían la custodia de los cuarteles de Lima, Chile sólo aceptó que la
guardia urbana cuidara el pueblo de la Magdalena y se le proveyó de armas.
La
siguiente medida del gobierno provisional fue la obtención de un préstamo con
el que se consiguió detener la exacción que estaba llevando a cabo Chile a los
vecinos notables de Lima los que tenían que cancelar 20,000 pesos mensuales que
de no entregarlos se les destruía sus bienes por el triple de este monto.
También se consiguió validar un lote de billetes inca encargados de imprimir en
el extranjero. Se puso orden en las cuentas de la hacienda pública y se hizo
esfuerzos para regularizar la actividad judicial que hasta entonces estaba
paralizada y se volvió a editar un Diario Oficial para avisos legales,
judiciales e información oficial.
A
la renuncia del presidente Piérola, Francisco García Calderón es reconocido por
Chile como Jefe de Gobierno. Una de las condiciones chilenas para el término de
la guerra era la cesión de territorios, pero Chile no avanzó en sus
pretensiones porque García Calderón
contaba con el respaldo de los Estados Unidos de América en esta
cuestión, hábilmente había ofrecido a EE.UU la concesión de Chimbote a cambio
de apoyo diplomático e incluso militar, lo que el presidente Garfield de EE.UU
aceptó.
El
25 de agosto de 1881, el embajador de
Estados Unidos en Perú, Mr. Hurlbut, envió una carta al Contralmirante
Patricio Lynch, jefe de las fuerzas de ocupación chilena, donde le informaba
claramente que Estados Unidos apoyarían
al Perú en el sentido de no ceder un pie de su territorio a menos que se
demostrara que el Perú no iba a ser capaz de pagar una indemnización de alguna
otra manera.
El
Contralmirante Lynch no contestó la carta. El 18 de setiembre de 1881, asume el
gobierno en Chile el Presidente Domingo Santa María, y el día 28 del mismo mes,
Lynch suspende el gobierno de García Calderón. El 6 de noviembre el doctor
Francisco García Calderón Landa es arrestado y deportado a Chile en el blindado
Almirante Cochrane, terminando así su participación en los acontecimientos como
Presidente del Perú.
Lo
sucedió el contralmirante AP Lizardo Montero Flores, quedando como Jefe del
Gobierno instalado en Arequipa.
García
Calderón fue deportado con su familia y miembros de su gabinete como Manuel
María Gálvez y el Comandante Pedro Gárezon. Sufrió prisión en Valparaíso,
Quillota, Rancagua, Angol y Santiago. Sufrió vejámenes y pasó días aciagos con
su esposa Carmen Rey y su pequeño Francisco quien nació en Valparaíso. En su
libro “Memorias del Cautiverio” relata
algunos de esos difíciles momentos que le tocó vivir y de cómo estando
prisionero se le quería obligar a firmar un tratado de cesión de territorios.
A
su regreso al Perú asumió la
Presidencia de la
Cámara de Senadores y el Rectorado de la Universidad de San
Marcos. En el Congreso se mantuvo hasta 1893 inspirando leyes básicas para la
reconstrucción y ordenamiento del país. En la Universidad de San
Marcos fue Rector de 1886 a
1890, y luego de 1895 a
1905, en su gestión aumentó el número de cátedras y reconstruyó las
instalaciones saqueadas por los invasores del sur.
Fue
elegido Senador por Puno de 1899
a 1905.
En
conclusión Francisco García Calderón fue un ilustre abogado, profesional influyente
y político decisivo, pero lo que más
enaltece al llamado Presidente Cautivo, Dr. Francisco García Calderón
Landa, es que prefirió las mazmorras de Chile, a ceder un metro cuadrado de
territorio peruano a Chile. En reconocimiento y gratitud a su vida ejemplar el
Colegio de Abogados lo ha nombrado como su “patrón” y por lo mismo el 2 de abril de cada año celebra el “día del
abogado” por ser cumpleaños de tan ilustre peruano. En Pueblo Libre también
lo recordamos permanentemente con el busto que todos los días observamos en
la esquina de Av. Vivanco con Av. San
Martín.
por Víctor Reyes Inca
Pueblo Libre, sábado 03 de abril del
2010.