Segundo pronunciamiento
del Patronato Cívico Cultural de Pueblo Libre en defensa del Museo Nacional de
Arqueología, Antropología e Historia del Perú y del legado de Julio C. Tello
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| Foto: Internet |
El Patronato Cívico Cultural de Pueblo Libre (PACCPUL)
continúa la defensa de la integridad del Museo
Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú (MNAAHP), un tema
crucial para la cultura peruana, como el más importante museo del Perú desde
hace 70 años, y en particular para la identidad de Pueblo Libre, como principal
atractivo turístico del distrito, cuyas sucesivas gestiones municipales han
conservado apropiadamente el ámbito externo del museo. En esa línea, planteamos
al respecto argumentos administrativos, jurídicos, legales,
histórico–culturales y de índole arqueológica.
Luego de nuestro primer pronunciamiento del lunes 18 de
mayo, que dio a conocer el plan arbitrario del Ministerio de Cultura de
destruir la memoria de Julio C. Tello y despojar al MNAAHP de sus colecciones
para llevarlas al proyectado Museo Nacional de Arqueología (MuNa), en
Pachacámac, el diario La
República publicó el 1 de junio lo siguiente: “la ministra de
Cultura, Diana Álvarez–Calderón, anunció que se ha iniciado el inventario de
todo el material que irá a Pachacámac.
Este proceso tomaría seis meses”. Es decir, se confirma la depredación que
amenaza al museo.
Lamentablemente, la obra del Padre de la Arqueología Peruana,
Julio César Tello Rojas, íntimamente
ligada al museo, ha sido reiteradamente objeto de graves perjuicios, ataques y
subestimaciones. Habitantes de Pueblo Libre que superan los 50 años de edad
recuerdan con emoción tanto el guión museográfico de las Salas de Exposiciones
que Tello había elaborado, como la réplica que recreaba fragmentos de dos
edificaciones chavinoides de Cerro Blanco y Punkuri, que él mismo había
descubierto en el valle de Nepeña. Fueron trabajos que en su momento
representaron un elevado costo para el Estado peruano, y que se desmontaron en
los años 70, durante la gestión como director del entonces Museo Nacional de
Arqueología y Antropología del arqueólogo Luis Guillermo Lumbreras (1973–1978),
que eran muy didácticos para el público, especialmente estudiantil y turista.
Con lo que se dañó el conocimiento de la colectividad de la riqueza patrimonial
de nuestros monumentos arqueológicos. En la actualidad dicho profesional es
asesor de la ministra en este despropósito.
Una segunda intención de atentar contra la memoria de Julio
C. Tello en nuestro distrito sucedió entre 2008 y 2010. La gestión del ex
alcalde Rafael Santos Normand en la Municipalidad de Pueblo Libre, en complicidad con
el Museo Arqueológico Rafael Larco Herrera (hoy Museo Larco), perpetró
arbitrariamente y mediante artimañas el retiro del busto de Tello y la
suplantación del Parque Chavín, colocando en su lugar un monumento de cuerpo
entero de Rafael Larco Hoyle y poniendo su nombre a este parque ubicado en el
Jr. Navarra, frente a la pared lateral del mencionado museo. En su oportunidad,
este acto de lesa cultura fue denunciado públicamente por este Patronato, como
consta en publicaciones impresas y electrónicas y documentos oficiales enviados
a la Municipalidad
de Pueblo Libre, la Municipalidad Metropolitana de Lima, el
Ministerio de Cultura y la
Defensoría del Pueblo. El gobierno edil local no reparó la
barbaridad cometida.
Recientemente, la emisora televisiva del Estado, Canal 7, ha sido escenario de un
escandaloso agravio proferido contra la memoria de Julio C. Tello, entre otras
falacias sobre el ámbito de la arqueología peruana. La edición del domingo 3 de
mayo de 2015 del programa “Casa Tomada”,
presentó una larga entrevista del periodista Raúl Tola al Dr. Lumbreras, quien
declara que cuando era estudiante, a fines de los años 50, la arqueología no
era una profesión y prácticamente no había arqueólogos, lo que es totalmente
falso, y se atreve a tildar de “arqueólogo semiprofesional” a Tello y señala,
como queriendo borrarlo, que “había muerto muchos años atrás”, cuando en
realidad Tello había fallecido sólo una década antes, en 1947.
Esta secuencia de hechos evidencia que existe una voluntad
soterrada y sistemática de desconocer y destruir la obra de Tello, y que el
proyecto de la ministra de Cultura es su faraónica conclusión. La figura
prominente de Tello en el campo de las investigaciones de la arqueología,
reconocida a nivel mundial, integra la esencia de la historia del Museo
Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú (MNAAHP), como parte
del patrimonio del distrito de Pueblo Libre, con el que ya forma un binomio y
una amalgama, sincronizando con los cánones del Consejo Internacional de Museos
– ICOM.
Tello fundó el Museo de Arqueología y Antropología. Es el
único arqueólogo peruano capaz de haber desarrollado cinco grandes proyectos de
investigaciones arqueológicas en todo el territorio nacional:
1919. 1ª. Expedición Arqueológica al Departamento de Ancash
y Alto Marañón.
1925. 2ª. Expedición Arqueológica a la Provincia de Cañete y
Valle de Asia.
1927. 3ª. Expedición Arqueológica al Departamento de Ica.
1937. 4ª. Expedición Arqueológica al Marañón y Valle de
Casma (a los templos de Cerro Sechín, Moxeke y otros).
1942. 5ª. Expedición Arqueológica al Urubamba (Machu Picchu,
Wiñay–Huayna).
Con singular tesón y sacrificado trabajo científico, Tello
consiguió el cuantioso patrimonio arqueológico de las diversas culturas del
Perú precolombino, que constituye casi el 100% de las colecciones que hoy
alberga el Museo Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú.
Además de reposar en las instalaciones del recinto sus restos
mortales por expreso deseo en vida, existe la obligación legal de mantener su
legado en el museo, pues el inmueble que ocupa fue una donación personal a
Julio C. Tello del ex Presidente del Senado de la República y ex Ministro
de Guerra, Germán Luna Iglesias, con
la condición de que si las colecciones atesoradas por el donatario Tello, se
retiraban del museo o eran afectadas de algún modo, el local revertía a los
herederos del donante. En consecuencia, de ninguna manera puede prosperar el
plan destructivo de la ministra Diana Álvarez–Calderón de llevarse miles de
piezas a Pachacámac, ya que el Estado perdería la posesión del inmueble y éste,
en manos de sus descendientes, podría eventualmente convertirse en un nuevo
centro comercial o condominio.
Para expresar con claridad la función y el espíritu de un
buen museo y su relación con la cultura, es necesario remitirnos precisamente a
una sabia reflexión de Julio C. Tello, que la ministra y quienes la rodean no
conocen:
“A un museo no se le
juzga por su edificio, ni aun siquiera por la rareza e importancia de sus
colecciones, sino por la labor técnica y sistemática que ahí se hace, por la
clase de hombres que allí trabajan, contribuyendo incesantemente al avance de
los conocimientos“.
Asimismo, hay que destacar la definición de museo del Consejo Internacional de Museos (ICOM):
“El museo es una
institución permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y de su
desarrollo, abierta al público, y que efectúa investigaciones sobre los
testimonios materiales del ser humano y de su medio ambiente, los cuales
adquiere, conserva, comunica y exhibe, con propósitos de estudio, educación y
deleite”.
El Patronato Cívico Cultural de Pueblo Libre demanda desterrar
el ataque sistemático, a nivel privado y gubernamental, contra la obra del
Padre de la
Arqueología Peruana, Julio C. Tello, y paralizar el retiro de
colecciones y la desmembración del Museo Nacional de Arqueología, Antropología
e Historia del Perú (MNAAHP), a favor del proyectado museo en Pachacámac. Por
otro lado, instamos al Ministerio de Cultura a que, por lo contrario, como
sugirió el arquitecto Jorge Ruiz de Somocurcio en un artículo publicado en el
diario El Comercio en 2014, invierta en el MNAAHP 100 millones de nuevos soles –
menos del 20% del presupuesto de dicho megaproyecto- para restaurar y
modernizar sus instalaciones, y poner esta institución a la altura de su
historia y del legado de su principal gestor, Julio C. Tello.
Finalmente, el PACCPUL convoca a la colectividad
pueblolibrense, la legión de admiradores y conocedores de la obra de Tello, y
la comunidad arqueológica y cultural peruanas, para fundar el Frente de Defensa del Museo Nacional de
Arqueología, Antropología e Historia del Perú, una iniciativa ciudadana de
carácter imprescindible, acorde con la identidad cultural de Pueblo Libre y el
país, para contrarrestar una pretensión vergonzosa, carente de toda lógica
legal, administrativa, técnica, académica y cultural.
Pueblo Libre, 19 de
junio de 2015
Patronato Cívico
Cultural de Pueblo Libre (PACCPUL)
